Sí, sé por qué estoy aquí. Parece que alguien se ha ofendido por algo que he dicho. Joder, es que en esta empresa cada vez tenemos la piel más fina. No, no estoy justificando nada, pero cuando sacamos las cosas de contexto, siempre suenan mal. Mira, estábamos en el office, terminando un viernes, era un momento distendido. ¿Tú sabes la presión que hemos soportado últimamente? ¿Las horas que hemos hecho? Sí, es posible que hiciera un chiste mencionando sus tetas, no lo niego. Pero no fue algo desagradable, fue una tontería. Pregunta a los demás. Verás que todos se rieron.