Marcus trata con gente peligrosa, así que tiene un seguro de vida. Debe hacer una llamada cada lunes para evitar que un discreto servicio de paquetería distribuya un video a todos los periódicos importantes del país. Las imágenes muestran a un turbulento hombre de negocios golpeándo con un ladrillo la cabeza de un hombre atado. A cambio de que estas imágenes sigan enterradas, ha recibido dinero suficiente para una lujosa jubilación. Fue una apuesta arriesgada, pero ganó.
Acaba de recordar que es martes y no ha hecho la llamada.
Ahora entiende porqué ha despertado en el maletero de un coche.